Tengo el AFS en mi ADN. Esta organización ha impactado profundamente mi vida y ha influido en muchas de mis decisiones. Me ha inculcado valores como el impacto social, algo que se ha reflejado en mi camino profesional. Soy administrador de empresas, pero gran parte de mi trabajo ha estado orientado a proyectos sociales y ONGs, gracias a la sensibilización que AFS despertó en mí.

Soy Víctor Herrán, ex participante de AFS Canadá 2003-2004. Me vinculé como voluntario en 2005 y he sido parte de la Junta Directiva durante ocho años. También fui voluntario de base en el Comité de Girardot y he colaborado con el Comité Nacional de AFS.

AFS cambió mi forma de ver el mundo, mostrándome que tenemos más cosas en común que diferencias, y que las diferencias no son malas; simplemente son diferentes. Este aprendizaje me ha acompañado siempre, recordándome que la interculturalidad es parte de nuestra vida diaria.

Hoy, vivimos en un mundo interconectado, donde no solo nos relacionamos con quienes están cerca, sino también con personas de todo el mundo. AFS me enseñó a ver estas diferencias como oportunidades para aprender y crecer, integrando conceptos y vivencias para superar desafíos.

Felices 65 años, AFS, educando para la paz.