Somos Natalia Ruiz y John Duque, orgullosos de ser una familia anfitriona de AFS. La decisión de recibir a un estudiante en casa surgió de nuestro deseo de conocer otras culturas y ofrecer un hogar lleno de amor y aprendizaje a alguien que llega con ilusión a nuestras vidas.

Lo más gratificante de esta experiencia ha sido observar cómo nuestro chico se adapta a nuestras costumbres mientras nosotros aprendemos de las suyas. Este intercambio cultural nos ha enseñado a valorar la diversidad en todas sus formas, fortaleciendo nuestro crecimiento como familia.

A las familias que aún están considerando abrir sus puertas, nuestro consejo es claro: ¡háganlo! Ser anfitrión no solo es traer a alguien de otro lugar a tu casa, es conectar con el mundo, aprender a ser más empáticos y entender que nuestras diferencias son nuestra mayor fortaleza.

Hoy, celebramos junto a AFS sus 65 años educando para la paz y fomentando un mundo más conectado. ¡Por muchos años más!